Días antes de que ocurriera la catástrofe en Valencia,
a mi me comienza una tos constante que no paraba.
Eran las 3 de la mañana, la noche anterior de que esto ocurriera, tosía sin poder parar,
busqué por internet algún remedio casero y haciendo un té de jengibre pude parar la tos casi al instante de tomármelo.
Yo no veo noticias, no veo TV, no leo periódicos, me mantengo ignorante de todo lo que sucede en el mundo por diferentes razones que esto daría para hablar en otro email,
principalmente no veo nada de esto porque está pensado todo esto para sacarte de tu centro, distraerte, robar tu energía, dispersarte, separarte y no tengas paz mental.
El día siguiente de la catástrofe me entero de lo sucedido porque un amigo me lo contó.
Me pongo a investigar un poco y ya me entero de todo.
Esa noche no pude dormir, todos mis sueños estaban conectados a las víctimas pidiendo ayuda, sentimientos de desesperación, miedos, incertidumbre, rabia, pena, desolación, de no volver a ver a su gente.
Al día siguiente primero apunté los nombres de todos los pueblos, barrios dónde había sucedido esto,
mi idea fue canalizar a los pueblos uno a uno, ir por zonas, calles, edificios, casas e ir armonizando a las personas, a esas almas que estaban atrapadas.
Cuando una persona fallece de repente, esos sentimientos que mencioné arriba, energías, pensamientos de que aún tenía que lograr cosas, de ayudar a su familia, de comunicarse con ellos,
al no poder realizar esto, se resisten a marchar, se quedan, esta energía se pone densa, se siente atrapada y se convierte en un fantasma, esperando que médiums podamos liberarlos.
Los médiums somos como el camión de la basura, reciclamos todas las toxicidades que existen en el planeta Tierra.
Una vez armonizadas estas almas, tienen la libertad de volver como guías espirituales, ángeles, hacer visitas en los sueños, ya desde una serenidad, amor y paz.
El proceso era lento porque tenía que revisar cada sitio armonizando las almas y llegó el lunes.
Ahora bien, esta parte que voy a contar ahora, quizás haya personas que no se crean nada de esto, y está bien, cada uno actúa desde su nivel de consciencia, puedes cogerlo como un cuento de hadas o no.
Yo formo parte de un grupo privado que nos juntamos cada quince días para hacer diferentes acciones para el planeta Tierra y el bien común de todos los seres que habitamos en ella.
Nuestras almas habían preparado todo para hacer una armonización conjunta en toda España.
En esta armonización vinieron seres de otras galaxias y multiuniversos para ayudar en este proceso.
Aquí estuvo presente el jefe de toda la galaxia, que no es Dios, el origen, el multiuniverso, como le quieras llamar.
Estos seres, estas energías están ayudando en el proceso de sanación del planeta Tierra.
El planeta Tierra es un ser vivo que desde el 2012 está transitando el perdón a sí mismo.
Y nosotros como médiums estamos ayudando en su proceso de armonización y sanación.
El lunes entramos a una sala que crearon las almas que en el centro estaba España y sus islas.
A su alrededor en un círculo estábamos 12.
Y más atrás en otro círculo más amplio estaban todas estas energías sosteniendo y ayudando también en el proceso de armonización.
Fuimos con la idea de armonizar Valencia, sin embargo, nos dijeron que con la ayuda de todos estos seres íbamos a armonizar toda España y solamente que hayan ocurrido catástrofes relacionadas con el elemento agua.
En el centro estaba España y se abrieron 5 caminos dónde comenzaron a subir todas las almas que estaban atrapadas por todas las catástrofes que ocurrieron, no solo este año,
sino también, de otros tiempos, de otras épocas,
épocas de cuando eran civilizaciones antiguas, de Lemuria y Atlántida.
A ese nivel se hizo la armonización.
Todo el proceso duró alrededor de 1 hora y media.
De los 5 caminos el último en cerrarse fue el de Valencia y una vez todas las almas llegaron a la luz,
España se iluminó con una luz de oro.
Y el jefe de la galaxia nos transmitió un mensaje que decía lo siguiente:
“Estos tiempos son para que estés en tu centro, en ti, sanando tu interior, que nadie ni nada te distraiga de tu camino, concentra toda tu energía en ti y mantente unido, la máxima de este tiempo es coexistir entre todos”.
Pasaron más cosas que me lo reservaré esta vez.
Y por último, cuando acabamos esta armonización, llegó el tiempo de compartir.
En este espacio cada integrante comparte, pone voz a todo el proceso de cómo lo vivió, lo que sintió, lo que desea aportar, etc.
Yo fui el primero en compartir, una vez que acabé de hablar y apagué el micrófono, de repente comencé a toser y toser, duré unos 15 minutos más o menos.
Una de las compañeras comentaba que había recordado en una vida pasada que se había ahogado en Atlántida.
Otra compañera comentaba que en una canalización que hizo hace un tiempo, una parte de Atlántida estaba dentro de España.
De repente me vino una memoria de una vida pasada que yo también había pertenecido a esta civilización y que también me ahogué.
Luego de que recordé esta vivencia del pasado, automáticamente dejé de toser. Ahí comprendí por qué tosía tanto.
Esa noche, soñé con todas las almas liberadas de Valencia, todo era gratitud, reverencias, abrazos, risas, me transmitieron mucha paz.
Y así es como pudimos resolver esta situación.
Miles de personas se unieron todos esos días a reconstruir los pueblos de Valencia.
Todos debemos estar unidos ahora más que nunca, sin juzgar, sin diferencias, porque unidos siempre somos más fuertes.
Desde hace unos años hasta ahora, todo tiene sentido del por qué estamos viviendo este tiempo presente.
Disfrútalo, comparte con tu gente, da lo máximo de ti, cumple tus sueños, el tiempo es ahora.